DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO:
Como primera del año, ya establecida en nuestro calendario del Club de Senderismo El Bastón, aquí os dejo con esta ruta que anda considerada por muchas páginas de internet entre las diez mejores rutas de senderismo de la provincia de Granada. Me refiero a la del Gollizno. Para ello nos desplazamos hasta Olivares, anejo de Moclín. Subimos por la calle donde están las escuelas, mientras vamos dejando atrás las últimas casas del pueblo. Giramos a la derecha siguiendo las indicaciones del sendero PR-A84 y bajamos a continuación hacia el río Velillos, cuyo nacimiento se encuentra en la localidad jienense de Frailes, nombre este que también recibe el río. Dejamos atrás, al poco, un antiguo molino restaurado y después llegamos a un puente con un tramo de subida en plataforma de madera, muy empinado por cierto, próximo a la "casa de la luz", y que nos lleva a la margen izquierda del río. Recorrido en ascenso ahora que pasa junto a la fuente de la Buenaventura, con una curiosa historia que cuenta Pedro Antonio de Alarcón del bandolero Parrón.
Continuamos nuestro
recorrido con una pequeña bajada y de nuevo sendero en ascenso hasta que, tras
algo más de 2 kilómetros recorridos, y tras dar con la señal indicadora, girando a la derecha y obviando el sendero
que se dirige al puente colgante y angostura del Gollizno, encararnos con el
repechón más pronunciado del recorrido, unos 150 m de desnivel que nos lleva sobre los Tajos de la Hoz y nos permite obtener una primera visual de Tózar, nuestro
siguiente objetivo. Cruzamos, primero
por un olivar y después por una vereda en fuerte ascenso que nos deja en la zona
arqueológica de Tózar. Enclave en donde
se encuentran restos de muchas épocas diferentes: un dolmen neolítico (la
Pileta de la Zorra), una necrópolis mozárabe, pequeños silos del siglo X, un
poblado mozárabe tipo alquería y construcciones defensivas de la Guerra Civil. Lugar
que aprovechamos para tomarnos un ligero tentempié.
Subimos hasta las
primeras casas de Tózar, echándole un vistazo a su lavadero público, que anda dedicado
a las mujeres del pueblo, en dirección seguidamente a una antigua torre de vigilancia. Se
trata de la Torre de Tózar o de la Porqueriza, de origen nazarí, situada en lo
alto de un cerro junto a otras estructuras defensivas de la Guerra Civil y desde las que se vigilaba el norte de Granada. Seguimos una vereda por la que recorremos
el cerro de Pitel y que nos acaba acercando hasta el puente sobre el río Velillos en la
carretera que va de Moclín a Tózar. Asfalto sobre el que caminaremos un poco
hasta cruzarlo. Tomando a continuación, a nuestra izquierda, un camino durante un kilómetro en continuo ascenso hasta nuestro siguiente objetivo: la fuente de Corcuela,
con su curiosa forma del laberinto, por
donde discurre y desagua la misma. Punto
en donde nos reagrupamos y continuamos con nuestro recorrido hasta el conocido
y señalado como mirador de Tózar donde podemos disfrutar, sobre su plataforma
de madera, de las vistas de todo el
valle y del comienzo del desfiladero que vamos a cruzar a continuación.
Dejamos el mirador
atrás, acometiendo ahora la bajada hasta el río Velillos. Un pronunciado descenso en zigzag, con mucha piedra suelta, que a pesar de estar bien
acondicionado con pequeños postes de madera, unidos por cuerdas para sujetarse, en buen estado por cierto, debemos de descender con precaución.
Disfrutando, ya nivelados y sobre la margen derecha del río, de la abundante vegetación
de ribera y sonido de las aguas.
Llegando, para muchos, al tramo estrella del recorrido: el desfiladero del Gollizno, un paso estrecho entre paredes de roca en el que se circula por pasarelas de madera clavadas en el lateral, sobre la margen derecha del río, hasta llegar a un puente colgante de unos 20 m que nos lleva al otro lado sobre un paisaje excepcional. Disfrutando in situ allí del Tajo de las Palomas, en el que destaca una enorme cueva natural, así como de los saltos del río entre las grandes rocas del lecho. Y cómo no de la toma obligada de instantáneas con algún que otro vaivén del puente, casi incontrolable, por el que vamos pasando por turno y casi pidiendo la vez.
Seguimos con nuestro recorrido, pasando al poco ya en descenso, hasta el punto donde nos desviamos para subir a Tózar, que ahora dejamos a nuestra izquierda, volviendo por el mismo camino de ida: fuente de la Buenaventura, y puente de madera (cercano a la "fábrica de la luz") y de allí hasta nuestro punto de inicio en Olivares.
¡Un saludo y hasta la próxima!
** Si gustáis, podéis ver otra ruta muy parecida, por algunos de estos mismos parajes, y que realizamos el 22 de noviembre de 2015, pinchando directamente aquí. En esta ocasión saliendo del anejo también de Moclín, el de Limones y con algo más de información sobre el conjunto arqueológico de Tózar y otros puntos de interés.
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